UNA FOTO EN UN LIENZO

Aquí estoy de nuevo en esta última semana de julio. Para los que cojáis las vacaciones en agosto... ¡ya está ahí! Y ya sabéis, a sacar fotografías para recordar los mejores momentos de esos días de descanso, esos paisajes espectaculares, ese recuerdo familiar, ese encuentro con amigos... Sea lo que sea se puede colocar en un lienzo como si del mejor cuadro se tratara. ¿Quieres saber cómo? Pues transfiriendo la imagen al mismo con el material adecuado y... paciencia.

Aquí se ve el material necesario: lienzo con bastidor, la fotografía impresa en láser o fotocopiada en tienda (láser), el medium para transferencia de imágenes y un pincel. Luego llegará un pequeño recipiente para agua y una esponjita. RECUERDA que la imagen impresa debe estar a la inversa de lo que quieras que se vea (impresa como si fuera un espejo)

Damos medium "foto transfer" a todo el lienzo y también a la imagen. Colocamos ésta intentando centrarla y vamos apretando por toda la superficie. Puedes ayudarte de los dedos, o de un trapito haciendo presión para que el producto llegue a todo y no queden burbujas.

Tras esto hay que dejar secar bien todo para pasar al siguiente paso. Yo lo dejo una noche y continúo al día siguiente, por asegurar... Lo que hay que hacer entonces es retirar la celulosa del papel, y para ello empapamos una esponjita en un poco de agua, escurrimos, para que no gotee. Esto lo voy haciendo por partes, no empapo todo el lienzo a la vez. Sobre la zona mojada se va pasando suave el dedo y enseguida empiezan a salir rollitos de celulosa.

Con tiempo y paciencia se va repitiendo el proceso por toda la imagen. Cuando ya se ha hecho la primera pasada vuelvo a repetir, así hasta ver que ya no sale más celulosa y que ha quedado la imagen transferida al lienzo.

En este caso, como la imagen no cubría los laterales, lo que hice fue pintarlos con una mezcla de marrones y negro, dando pinceladas de forma irregular.

Para finalizar, proteger y avivar los colores barniz mate y listo. Un recuerdo listo para colgar y lucir. O un regalo, como fueron estos, de Reyes, para mis hijos.

Pues ya tienes las tres maneras que te mostraba inicialmente para presentar tus fotos preferidas:

1- haciendo un portafotos a partir de una caja de frutas

2- colocando la imagen sobre una base de cristal

3- transfiriendo la imagen en un lienzo

¡Espero que te hayan gustado!

Este mes de agosto haré una entrada más y me tomaré un descanso blogueril, ya que, entre otras cosas, ando liada con un proyecto nuevo que espero poder presentar en septiembre... ¿qué será? ¡Sígueme y lo sabrás! Por cierto, desde hace poquito me puedes seguir también en Instagram

¡Te espero!